
30/10/2025
Recircula Brasil: trazabilidad que impulsa la circularidad, la innovación y el desarrollo social
*Por Paulo Teixeira*, presidente ejecutivo de ABIPLAST
Sin trazabilidad y transparencia, la economía circular corre el riesgo de quedarse como un discurso vacío. Pero, ¿qué significa realmente trazabilidad? No es más que la capacidad de seguir el recorrido de los residuos, desde su origen hasta su transformación en nuevos productos, registrando cada etapa de manera clara y confiable. Este seguimiento asegura que las empresas puedan comprobar de dónde provienen los materiales reciclados, cómo fueron procesados y quiénes participan en la cadena productiva.
La transición hacia modelos productivos más sostenibles requiere precisamente esto: información confiable sobre el origen de los residuos, la formalidad de las transacciones y la integración de todos los actores. Es en este contexto que Recircula Brasil se consolida como una respuesta concreta a los desafíos de la circularidad, reuniendo empresas, gobierno y sociedad en torno a una agenda de transformación.
Transparencia como motor de competitividad
El sector productivo ya reconoce la importancia de la agenda ESG, pero todavía enfrenta barreras para convertir principios en prácticas. Sin información trazable, las empresas pierden competitividad, debilitan sus compromisos climáticos y reducen la credibilidad de sus iniciativas.
El programa, desarrollado por ABIPLAST en asociación con la Agencia Brasileña de Desarrollo Industrial (ABDI) y con verificación independiente, demuestra que es posible dar escala a la transparencia, aumentar la confiabilidad de la cadena y fortalecer la gobernanza.
Al dar visibilidad y formalidad a las transacciones, la iniciativa valora el trabajo de los recolectores, garantiza reconocimiento a la cadena productiva y amplía los beneficios socioambientales de la economía circular. Esto significa que, en la práctica, las empresas pueden demostrar la sostenibilidad de sus productos, los consumidores ganan confianza en las marcas y el medio ambiente se preserva con menos residuos en vertederos o en la naturaleza.
Del discurso a la práctica
No es casualidad que la COP 30 tenga la economía circular como tema oficial. Recircula estará presente en este debate internacional, mostrando que Brasil tiene soluciones propias para combatir la contaminación plástica y reducir emisiones. El mensaje es claro: la circularidad no es solo una agenda ambiental, sino también una estrategia de competitividad y de transición hacia una economía baja en carbono.
Los resultados hablan por sí mismos: 17 empresas usuarias, más de 41 mil toneladas de plástico verificadas, 400 proveedores conectados en 10 estados y más de 850 clientes en 20 estados.
El desafío ahora es la escala. No basta con que algunas empresas avancen de forma aislada: es imprescindible que el rastreo del plástico se convierta en norma en el sector productivo. Quien no se adapte corre el riesgo de quedarse atrás en un mercado cada vez más exigente y regulado.
Caso de impacto: AVPLAS
AVPLAS, industria transformadora de plásticos, es un ejemplo de cómo la adhesión a Recircula genera resultados concretos. Con la plataforma, la empresa logró rastrear y demostrar el origen de los residuos retirados de las playas de Santa Catarina y de los materiales reciclados utilizados en sus productos. Esto agregó valor a la marca, aumentó la confianza de clientes y socios, y demostró que sostenibilidad y competitividad pueden ir de la mano.
El avance del programa demuestra que la circularidad ya es una realidad en expansión, sostenida por tecnología, innovación e inclusión social. Más que una plataforma, se trata de un instrumento de transformación que conecta empresas, cooperativas y consumidores en una red transparente y colaborativa, capaz de generar un impacto positivo para el país y el planeta.
Un sector estratégico para Brasil
El sector plástico es uno de los más relevantes de la industria nacional, con más de 14.600 empresas distribuidas por todo el país, que producen una amplia gama de soluciones y generan cerca de 404.600 empleos directos. Ocupa la cuarta posición como mayor empleador de la industria de transformación brasileña, según datos de ABIPLAST. Solo en 2023, se produjeron más de 7,4 millones de toneladas de productos y, en 2024, el índice de reciclaje mecánico de envases plásticos posconsumo alcanzó el 24,4%.
*Este texto fue traducido automáticamente con la ayuda de inteligencia artificial y revisado. Aun así, pueden presentarse pequeñas diferencias con respecto a la versión original en portugués.
*Paulo Teixeira, presidente ejecutivo de ABIPLAST
Economista, máster en Desarrollo Económico y doctor en Ingeniería de Producción. Ha trabajado como consultor para FAO/ONU, PNUD y SEBRAE en la formulación de políticas de desarrollo. Es presidente ejecutivo de ABIPLAST, director superintendente del SINDIPLAST-SP, director financiero del INP, consejero del Foro Nacional de Economía Circular (MDIC) y consejero de la Comisión Nacional de Incentivo al Reciclaje (MMA), con trayectoria enfocada en la industria del plástico y la promoción de la competitividad e innovación del sector.


