Incendios y la calidad del aire en Brasil: ¿cuál es el potencial de la Economía Circular en esta cuestión?

En una entrevista, el Prof. Dr. Edson Grandisoli, embajador del Movimiento Circular, resalta la gravedad de la situación en Brasil y sugiere medidas de contención.

Por Arlene Carvalho, de Movimiento Circular
 

Los noticieros brasileños han destacado el aumento de incendios y focos de fuego en el país, y cómo esto está directamente relacionado con la calidad del aire que respiramos. Según datos del Monitor del Fuego Mapbiomas, de enero a agosto de 2024, cerca de 11.39 millones de hectáreas de tierras brasileñas fueron devastadas por el fuego, siendo que casi la mitad de esa área (aproximadamente 5.65 millones de hectáreas) se quemaron solo en el último mes. Estos incendios no solo destruyen grandes áreas de vegetación, sino que también impactan la biodiversidad, afectan la vida de poblaciones vulnerables y deterioran considerablemente la calidad del aire, ya que el humo liberado puede causar problemas respiratorios y sobrecargar el sistema de salud pública del país.

Los problemas se extienden mucho más allá de las áreas directamente afectadas, alcanzando aproximadamente al 60% del país, de acuerdo con el Ministerio de Salud de Brasil. En una entrevista, el Prof. Dr. Edson Grandisoli, coordinador pedagógico y embajador de Movimiento Circular, destacó la gravedad de la situación y sugirió medidas para contener la amenaza, como la transición hacia la Economía Circular.

¿Qué regiones de Brasil están siendo más afectadas por los incendios en 2024?

En esta época del año, es bastante típico el aumento de incendios en diferentes regiones de Brasil, ¿verdad? Este año, lamentablemente, estamos viendo un aumento en la intensidad y frecuencia de los incendios, afectando entre el 10% y el 15% del Pantanal, sin mencionar los llamados megaincendios en la Amazonía. También hay muchos incendios ocurriendo en el interior de San Pablo y en Mato Grosso. Y es una práctica que, lamentablemente, sigue ocurriendo en la mayoría de los estados. Está muy asociada a prácticas agrícolas poco sostenibles y también a incendios provocados intencionalmente.

¿De qué manera los incendios afectan la calidad del aire y la salud pública en todo el país?

Los incendios afectan mucho más allá de las regiones donde ocurren. Muchos piensan que solo la población local sufre las consecuencias. Pero eso no es cierto. Basta con abrir la ventana ahora y constatar la enorme dispersión de humo y hollín por vastas áreas de Brasil. Las masas de aire, las corrientes de aire, circulan por todo el país. Hace algunos años, cuando hubo un incendio fuerte en el Pantanal, la ciudad de San Pablo se cubrió de hollín. Estamos viviendo esto de nuevo, pero a mayor escala e intensidad. No es niebla, es hollín y humo. Las masas de aire pasan por estas regiones incendiadas, y especialmente por aquellas con incendios muy intensos, y arrastran este humo, esta contaminación y gases tóxicos hacia lugares muy distantes. Por lo tanto, gran parte de las regiones del país terminan sufriendo las consecuencias de estas prácticas, que insisto, son altamente insostenibles. Esto perjudica la salud de las personas, especialmente de los niños y los ancianos, agrava las desigualdades y aumenta el número de personas con enfermedades respiratorias, saturando los centros de salud. Es fundamental que las personas tomen conciencia. El camino a seguir incluye la fiscalización, multas – que deben ser aplicadas por los gobiernos y organismos competentes – y, de manera más proactiva, el cambio de prácticas en el uso de los suelos.

¿Cómo puede la transición hacia la Economía Circular ayudar a reducir la dependencia de los incendios en la agricultura y minimizar sus impactos negativos en el medio ambiente y la salud pública?

En Movimiento Circular hemos hablado mucho sobre la producción de alimentos y el uso de la tierra. En lugar de usar fuego para limpiar áreas, las prácticas circulares incentivan la compostaje, el reciclaje de nutrientes, la producción agroforestal, la bioeconomía, la valorización de la producción local a pequeña escala y el manejo sostenible de los suelos, por ejemplo, lo que reduce o elimina la necesidad de incendios y nuevos desmontes. Esto reduce las emisiones de contaminantes, mejora la salud del suelo y preserva la biodiversidad, además de mitigar los impactos en la salud pública relacionados con los contaminantes liberados por los incendios. Las técnicas, los ejemplos y las tecnologías ya existen. Necesitamos buscar formas para que todo esto gane escala, importancia, y demostrar que sí es posible producir, generar ganancias y crear oportunidades, garantizando un ambiente de calidad para todos.

Sobre Movimiento Circular

Creado en 2020, Movimiento Circular es un ecosistema colaborativo que se dedica a fomentar la transición de la economía lineal a la circular. La idea de que todos los recursos pueden ser reutilizados y transformados es el lema de la Economía Circular, el concepto base del movimiento. Movimiento Circular es una iniciativa abierta que promueve espacios colaborativos con el objetivo de informar a las personas e instituciones de que un futuro sin residuos es posible a través de la educación y la cultura, la adopción de nuevos comportamientos, la inclusión y el desarrollo de nuevos procesos, productos y actitudes. Este trabajo cuenta con la colaboración pionera de Dow, una empresa de productos químicos y plásticos con sede en Michigan, Estados Unidos. El Movimiento Circular ha impactado a 5 millones de personas a través de sus activaciones y contenidos.

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